Conoce las razones por las que mayoría de tus relaciones amorosas no funcionan. Y es que a veces eliges mal o simplemente saboteas tu propia relación. Aquí te va una lista para que dejes de sufrir y comiences a tomar mejores decisiones en tu vida. | Fuente: Google

Si piensas que no has tenido suerte en el amor y que la mayoría de parejas que has tenido no han sido las correctas es momento de hacer la retrospectiva y no, esto no es un capítulo de un libro de autoayuda sino más bien una lista de lo que simplemente no debes de hacer cuando tienes una relación.

Distancia emocional: Muchas veces cuando comienzas una relación disfrazas tus miedos con frialdad y esto hace que no digas lo que sientas o pienses en el momento indicado distanciándote de la persona con la que estás y no dando el 100%.

Mucha ansiedad: Sabemos que probablemente no has tenido pareja un tiempo considerable, entonces comienzas a salir con alguien y esa persona parece el indicado. Allí aparecen las preguntas en tu cabeza de a si en verdad le gustas o no y a tratas de descifrar si lo que te dijo la última vez significaba otra cosa, es allí donde debes de respirar y dejar que las cosas fluyan porque claramente estás ansiosa.

Conoce las razones por las que mayoría de tus relaciones amorosas no funcionan. Y es que a veces eliges mal o simplemente saboteas tu propia relación. Aquí te va una lista para que dejes de sufrir y comiences a tomar mejores decisiones en tu vida. | Fuente: Google

Tratar de agradar: Todos queremos tratar de agradar a las demás personas y esto es peor cuando se trata de alguien que nos gusta o nos interesa. Sin embargo, no debes de tratar de complacer a la otra persona todo el tiempo porque evidentemente perderás tu esencia y no serás tú mismo.

No persigas a nadie: Esta es una frase que parece obvia pero no siempre la hemos interiorizado, probablemente quieres saber qué hace o dónde está la persona que te gusta y nos encanta que seas comunicativa pero todo tiene un límite; si mandas 10 mensajes al día y no tienes respuesta simplemente no es que la comunicación esté fallando sino que la que está fallando eres tú porque una relación no se trata de perseguir.

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