Si durante el último mes has terminado tu relación amorosa dos veces y has vuelto a regresar, entonces te decimos que algo anda mal. Y es que el círculo vicioso de terminar-regresar-terminar-regresar te hará sufrir tarde o temprano de angustia psicológica. Así que deja necedad y decir que “no vas a encontrar a nadie más que él” porque lo único que estás logrando es dañarte a ti misma.
Una investigación de la Universidad de Missouri demostró que cuando estás en este tipo de relación puedes sufrir de angustia psicológica. Para determinar ello, se encuestó a 545 personas que tenían una relación amorosa y se descubrió que aproximadamente un 1/3 de los participantes vivían en este tipo de relaciones. En ellos, se detectó mayores tasas de ansiedad y depresión.
Para nadie es bonito acabar una relación amorosa, ya que genera angustia, pero cuando estas rupturas son frecuentes comenzarán a dañar, tarde o temprano, tu estado emocional. Caer n este círculo vicioso es debido a la costumbre, conveniencia u obligación, características que no son propias de un buen noviazgo.
Así que si tú que estás leyendo esto te encuentras en este tipo de relación es momento que termines de una buena vez; las buenas relaciones no te hacen sentir angustia ni depresión sino te dan felicidad.